Chorizo suspiro

Su característica más distintiva es sus pequeñas divisiones de forma alargada, que se asemeja a una "sarta" o cuerda, y suele estar envuelto en una tripa natural que le da su forma tradicional.

La base de este delicioso embutido es una mezcla de carne de cerdo picada finamente y, a veces, carne de res, que se combina con una mezcla de especias que le aportan su sabor característico. Estas especias pueden incluir pimentón, ajo, pimienta negra y otras, que le otorgan un sabor profundo.

El proceso de elaboración comienza con la preparación de la carne y las especias, que se mezclan minuciosamente para asegurar una distribución uniforme de los sabores. Luego, esta mezcla se embute en tripa natural, dependiendo de la tradición regional y las preferencias del fabricante. La tripa actúa como una envoltura natural que permite que el chorizo conserve su forma mientras se cura.

El chorizo de sarta es conocido por su proceso de curado, que puede llevar varias semanas o incluso meses. Durante este período, el embutido se cuelga nuestro secadero, permitiendo que las enzimas y los microorganismos presentes en la carne realicen su trabajo de maduración. Esto contribuye a la intensificación de los sabores y a la textura firme y suculenta del chorizo.

Este embutido se consume de diversas maneras: ya sea cortado en finas rodajas y servido como aperitivo, incorporado en guisos y platos de arroz, o asado a la parrilla para potenciar su sabor ahumado.

INGREDIENTES: Paleta, panceta, especias, sal, pimentón, azúcar.